«SUPER quiere pasar un día de vacaciones contigo, Michel». Está rodeado de «amiguitas» en la piscina del chalet de Porta Coeli, pero su respuesta no tarda ni un segundo. «¡Venga, perfecto, sabes que no soy muy amigo de la arena, pero tengo ganas de mar!» ¿Dónde vamos?», le pregunto. «A la ´Malva´, ¿te atreves a hacer piragüismo?». «Claro, tú mandas», le respondo yo con el miedo ya en el cuerpo por mi inexperiencia.
La escuela marítima de la Malvarrosa del Consell Valencià de l´Esport sería nuestro punto de encuentro. «Coge tú una piragua y yo otra que te voy a ganar», me dice convencido. Pronto me doy cuenta de que el canterano no sólo es bueno con el pie en el fútbol. Después de veinte minutos navegando, Michel llega a la orilla levantando los brazos en señal de victoria mientras yo he volcado en medio del mar con chapuzón incluido.
«En verano me gusta mucho hacer deportes y si son acuáticos mejor. Te he ganado, al final he cogido velocidad y todo con la corriente a favor, pero lo importante es echarse unas risas, hacer deporte y disfrutar del mar y del sol, ¿no? El truco es que cuando te viene la ola por detrás no te coja con la piragua de lado. ¡Si no está recta estás perdido!». Confirmado. Michel no sólo es el aire fresco de Mestalla, también es un lobo de mar en aguas de nuestra Malvarrosa.
Pero las aguas de la ´Malva´ no son el único escenario de las vacaciones de Michel.
«En vacaciones me despierto más tarde, almuerzo con mis amigos que están ´currando´ todavía hasta agosto y como en casa de mi abuela Juliana. Ella me dice... te faltan unos ´kilicos´, que estás flaco. ¡Me pone un montón de comida! Luego hago la siesta, un poquito de amigos y a las 20:30 salgo a correr por Porta Coeli o La Granja en Burjassot. Cuando acabo me ducho y salgo por ahí un rato ahora que puedo con Xavi, Óscar ´el Mini´, Iván, Miguel ´el Presi´... Tengo tantos amigos que llenaría todo el periódico. ¡A todos los frío a bromas!».
Ibiza, San Sebastián y, por su puesto, Porta Coeli y Alpuente han sido otros de sus destinos veraniegos. «Me fui a Ibiza tres días. Menuda liamos en el hotel con un extintor. Nos tocó limpiar toda la habitación, si no nos echaban. Luego estuve en San Sebastián. ¡Es guapísimo! Pero, de donde no salgo es del chalet de Porta Coeli. Allí nos vamos a la piscina del Poli de la urbanización y lo pasamos en grande.
Y, claro, soy un fijo en las fiestas de mi otro pueblo, Alpuente(Buena información), y las de las siete aldeas de al lado. Con bailes, Moros y Cristianos, etcétera. ¡No falta de nada!».
También ha tenido tiempo para el estudio estas vacaciones. Michel se examinó de tres asignaturas de su Grado Superior de Administración y Finanzas y ya conoce las notas... «Al acabar la temporada me puse a estudiar y he aprobado dos, suspendí una y me dejé dos para septiembre. No está mal, ¿no?». Está «preocupado» por sus estudios, «alucina» con que la gente «me dé ánimos hasta en los semáforos» y ya cuenta los días para que llegue el 13 de julio. «Tengo ganas de empezar. Ojalá cumpla mi sueño y me haga un hueco en el primer equipo del Valencia».
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